miércoles, 2 de noviembre de 2011

MIÉRCOLES 2 DE NOVIEMBRE DE 2011. "No, si no hace nada..."

Es cierto, lo reconozco... cuando estoy solo y me siento a escribir algo o cojo la guitarra, tengo una enorme tendencia a la reflexión pausada, teñida de melancolía y con pequeñas dosis de dramatismo trascendental. Eso se está filtrando al blog, así que antes de que la gente que lo lee (no sé si a estas alturas ya aguantará alguien) empiece a cortarse las venas, debo dejar entrever otro tipo de entradas más terrenales que también suceden durante el camino a Donosti 2011.

¿Cuántos de vosotros, corredores, habeis escuchado por los parques la mítica frase: "no, si no hace nada..."? ¿y cuántas lesiones o, en el mejor de los casos, fuertes contusiones se han producido justo después de escuchar la frasecita?

La semana pasada iba yo desperezándome durante los primeros minutos de entreno después de dejar a los peques en el cole. Era día de series, tocaban 4 x 2000 metros y no quería que ninguna de las repeticiones se me fuera más allá de 8min10s. Iba dándole vueltas al tema mientras calentaba, escapándoseme algún bostezo, cuando de repente un perrazo con ganas de jugar se puso a correr a mi par. Al cabo de un rato de una viva carrera en paralelo se me metió entre las piernas, me trastabillé y estuve a punto de dar con mis huesos en el suelo.

Conseguí detener mi marcha, y viendo la absoluta pasividad de su dueña, que observaba el incidente como el que ve un atardecer, estuve tentado de decirle algo. Pero si ella no había dicho nada hasta entonces, mucho menos iba a ser receptiva a mi conversación, así que simplemente reanudé la marcha refunfuñando para mis adentros. En cuanto la tipa me escuchó farfullar dialectos oscuros para el cuello de mi cortavientos mientras me alejaba, me dedicó una bella frase: "Ya están los putos corredores, que encima se quejarán!!!".

Entiendo que un perro reaccione con ganas de jugar, sobre todo si, como era el caso, es un perro jóven y en forma. Entiendo que los caminos son para todos. Entiendo muchas cosas. Lo que no entiendo es que haya licencia gratuita para molestar al prójimo. Si ves que tu perro lleva un rato poniendo en peligro mi estabilidad, al menos llámalo. Si ves que tu perro se me mete entre las piernas cuando voy a 4:40 min/Km, al menos trata de sujetarlo (no digo que lo sujetes, solo que trates de hacerlo!!!). Y si ves que ha estado a punto tirarme al suelo y provocarme, cuando menos, unas buenas contusiones, adviértele de que para la próxima no lo haga. Pues no. Vaya hijos de puta los corredores que enganchan sus piernas con mi perro. Vaya telaaaaaaaaa...

Solo espero que la señora en cuestión no sea ni haya sido madre nunca, porque a ver quien es el guapo que les tose a sus hijos cuando hagan algo mal.

Por cierto, las series me salieron de cine.

2 comentarios:

  1. Por culpa de gente como esa, que no está pendiente de lo que hace su perro mi hermano se pegó un hostión mientras entrenaba con la bici porque se le cruzó un perro que su dueño dejó suelto cuando no debía y se partió varias costillas, además de las muchas contusiones y heridas que se hizo en la caida. Y todavía tuvo que dar gracias porque podía ser mucho peor.
    Todos deberíamos saber que no vivimos solos en el mundo. Por cierto, Barri, me está gustando lo que escribes, aunque por ahora, te noto un tanto pesimista. A ver si mejora el estado de ánimo en las proximas entradas.

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  2. Gracias tronco!!! La verdad es que no te creas que el ánimo mejora nada...

    ¿Qué tal vas de tu lesión?

    A ver si nos vemos antes de las Navidades...

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